Cómo desarrollar tu creatividad y crear ideas geniales

Cómo desarrollar tu creatividad y crear ideas geniales

Una vez escuché que la creatividad no es otra cosa que tener la capacidad de traer al presente diferentes estímulos a los que estuviste expuesto en tu experiencia por la vida, combinarlos de forma productiva y crear una idea. Por lo tanto, me atrevo a decir que si trabajas la memoria, trabajas la creatividad.

Estadísticamente, nada de lo que nos parece original realmente lo es: Todo tiene sus raíces o inspiraciones en algo más, sólo que no nos damos cuenta porque no conocemos esas referencias. Ese “algo más” también es una combinación de otras ideas, que a su vez son una combinación de otras ideas, y así sucesivamente. De ahí la importancia casi extrema de ser una persona observadora con todo lo que pasa a nuestro alrededor, para luego traer esas referencias y volcarlas en una idea.

Pocas veces nos enseñan cómo generar ideas o cómo potenciar nuestra creatividad. En este artículo, me puse como meta contarte mis más atesorados consejos sobre desarrollar la creatividad. Mi objetivo es ayudarte a dejar fluir tu imaginación, permitiéndote crear propuestas innovadoras y cautivadoras. ¿Me acompañás en este viaje?

La observación como clave de la inspiración

Observar tu entorno de manera consciente es esencial para nutrir la creatividad. Prestá atención a todo lo que te rodea y anotá todo lo que te parezca interesante. Existen herramientas de gestión como Notion, Trello, Milanote, Google Drive, Pinterest, Mymind que te permiten guardar y organizar tus inspiraciones, incluso un cuaderno personal. El objetivo es que tengas un lugar específico al que recurrir para buscar ideas disparadoras que te permitan crear nuevas.

Recién hablamos de la observación hacia el entorno, pero también es importante observar lo interno. La clave se encuentra en desarrollar la capacidad de reconocer nuestros recursos disponibles, esos que tenemos a nuestro favor. En lugar de enfocarte en lo que te falta, aprovechá al máximo los recursos que ya tenés a tu disposición. Por ejemplo, podés reflexionar sobre el espacio de tu hogar que podrías utilizar como rincón creativo, identificar los momentos del día en los que sentís más inspiración y revisar tus referencias para con el mundo, como libros y películas favoritas. Todos esos elementos -en realidad, toda tu historia- forman parte de tu bagaje creativo.

Antes de seguir, te dejo una lista de sitios que puedes observar, sobre todo si estás buscando inspiración visual:

  • Dribbble: Una plataforma para descubrir y compartir diseños creativos.
  • Behance: Una comunidad online donde los diseñadores pueden mostrar su trabajo.
  • Pinterest: Una fuente inagotable de inspiración visual y creativa.
  • Designspiration: Una galería de diseños, fotografías y proyectos innovadores.
  • GoMoodboard: Una herramienta para crear tableros de inspiración y organizar tus ideas.
  • Awwwards: Una web que premia a los mejores diseñadores, desarrolladores y agencias web según un jurado de expertos.

Estimulá tu cerebro

Estimular y ejercitar el cerebro mediante actividades como la lectura, el aprendizaje de nuevas habilidades o la resolución de acertijos fortalece nuestra capacidad creativa. Mantenernos abiertos a nuevas experiencias y explorar diferentes áreas de interés estimula nuestra mente. Entonces, ¿cómo podemos impulsarnos a generar ideas frescas?

  • Jugá con tu entorno: Cambiar de entorno o alterarlo ayuda a estimular la creatividad. Exponerse a lugares nuevos, trabajar en espacios creativos o simplemente salir a caminar puede inspirar nuevas perspectivas. Todas las cosas dependen del lente con el que las mires, ¿cierto?
  • Alimentá tus hobbies: Nunca subestimes el poder de tus intereses y hobbies en el desarrollo de tu creatividad. Realizar actividades que te gustan amplían tus conocimientos, ya que cada experiencia enriquece tu perspectiva y te vuelve una persona más completa. Nunca sabes de dónde puede surgir la próxima gran idea.
  • Cultivá la curiosidad: Para ser observadores, primero tenemos que ser curiosos. Si eso que queremos observar realmente no nos interesa, difícilmente llegemos a registrarlo. Y si encontramos a un grupo de personas curiosas como nosotros, ¡mejor! El trabajo en equipo siempre nos enriquece y nos impulsa.
  • La versatilidad le da flexibilidad a tu enfoque: Probar diferentes enfoques y métodos para abordar un problema amplía nuestra capacidad creativa, a la vez que la experimentación nos ayuda a fomentar la innovación y la generación de ideas. Mantené tu mente abierta y considerá, en todo momento, diferentes perspectivas. Recordá la frase “no te enamores de tu idea” cada vez que sospeches que tu idea es la mejor.

Por último, no temas inspirarte en tus referentes y en las referencias que admires. Copiar no implica replicar exactamente (y no deberías hacerlo), sino aprender de los mejores y luego agregar tu propio toque personal.

Mi último consejo es: experimentá todo lo que puedas. Es que cuanto más amplio sea tu repertorio de experiencias y estímulos, más materia prima tendrás para crear ideas originales. ¡Viví!

Buena suerte en tu viaje creativo.